Effect of weed competition on established plantain (Musa AAB) orchard

Recibido el 01-08-1995l Aceptado el 18-06-1997
1. Proyecto financiado por el Consejo de Desarrollo Cient�fico y Human�stico de La Universidad del Zulia (CONDES)
2. Instituto de Investigaciones Agron�micas, Facultad de Agronom�a. Universidad del Zulia, Facultad de Agronom�a. Apto. 526. Maracaibo, Venezuela.

Resumen

Este trabajo se realiz� durante 1993 y 1994, en el Municipio Col�n, Estado Zulia, con el objetivo de determinar el r�gimen de control de malezas m�s econ�mico. Para ello se seleccion� una plantaci�n de pl�tano (Musa AAB) de m�s de diez a�os de edad y se probaron seis frecuencias de control manual de las malezas: limpio todo el tiempo, limpio cada mes, limpio cada dos meses, limpio cada tres meses, limpio cada cuatro meses y limpio cada cinco meses. El dise�o experimental fue un bloques al azar con cinco repeticiones. Las variables de crecimiento fueron afectadas significativamente por la frecuencia del control de las malezas. Los tratamientos limpio todo el tiempo y limpio cada mes se cosecharon primero que los dem�s, a los 10.7 y 10.9 meses respectivamente. El mayor peso de racimo correspondi� al tratamiento limpio todo el tiempo con 16.414 kg de peso y un rendimiento estimado de 20.437 kg/ha. Sin embargo, el an�lisis econ�mico, realizado en base al costo del control de las malezas determin� que el m�ximo beneficio se obtuvo con el tratamiento limpio cada dos meses, con un ingreso estimado anual de 456.858 Bs/ha (6 controles/a�o) y un rendimiento de 17.745 kg/ha.
Palabras claves: Musa AAB, malezas, competencia, control manual, costos.

Abstract

Introducci�n

En el cultivo de las Mus�ceas, las malezas constituyen un factor de primer �rden, por los diversos efectos que ocasionan, siendo quiz�s, el m�s importante la reducci�n dr�stica de los rendimientos la cual puede alcanzar hasta un 60 % (6, 8). La magnitud de este problema es tal, que el 33 % de los costos directos de operaci�n en el cultivo del pl�tano corresponden al control de las malezas (1).

Con el fin de aminorar la acci�n negativa de las malezas, se ha estudiado el fen�meno de la competencia en estos cultivos. As� en la etapa de establecimiento, por ejemplo en pl�tano, el cultivo debe permanecer libre de malezas por un m�nimo de seis meses despu�s de la siembra, con el fin de evitar reducciones significativas en el rendimiento (7, 8, 9). En cuanto a la frecuencia del control de las malezas en el pl�tano, los int�rvalos mayores de seis semanas reducen significativamente el porcentaje de establecimiento, crecimiento vegetativo, tiempo de cosecha y peso del racimo (3). Respecto al banano, �ste debe permanecer libre de malezas los primeros cuatro meses de su ciclo para evitar bajas significativas en la producci�n (4, 5).

La informaci�n existente hasta ahora est� referida exclusivamente a plantaciones j�venes, sin embargo, la mayor�a de los platanales del Sur del Lago de Maracaibo superan los diez a�os de edad, donde la problem�tica de la competencia de las malezas es otra, debido a la propagaci�n vegetativa del cultivo y el manejo agron�mico del mismo. As�, el 60.9 % de los productores utiliza el control de malezas manual alternado con el qu�mico (1). Pero hoy en d�a, el costo de los agroqu�micos se ha elevado demasiado, a tal fin se debe afinar muy bien la metodolog�a de combate de las malezas. Por eso, el objetivo fundamental de este trabajo fue determinar el efecto de la frecuencia de la limpia manual de las malezas sobre el crecimiento y producci�n del pl�tano en plantaciones de pl�tano ya fundadas; con el fin de establecer un r�gimen de control de las malezas que permita obtener la mayor producci�n al m�s bajo costo.

Materiales y m�todos

Este trabajo se realiz� durante los a�os 1993 y 1994, en la finca "Las Trece", ubicada en el sector la Gran Parada, Municipio Col�n, Estado Zulia (08� 50' N, 72� 45' W, 20 msnm). La precipitaci�n promedio anual durante la realizaci�n del estudio fue de 1.370 mm. La temperatura promedio anual es de 26.9 �C y la humedad relativa promedio 83 %.

Los suelos de la finca son de textura franco limosa, con un pH ligeramente b�sico, buena conductividad el�ctrica, buen contenido de nitr�geno, bajo contenido de f�sforo y potasio, alto contenido de calcio, magnesio y una buena relaci�n de los mismos (cuadro 1). El elemento m�s deficitario fue el f�sforo, por lo cual se procedi� a realizar aplicaciones del mismo junto con el potasio para subsanar cualquier deficiencia. Estos suelos pertenecen a la Unidad Chama y han sido clasificados como Fluventic Eutropepts (2).

Como material clonal se seleccion� una plantaci�n de aproximadamente diez a�os de edad, perteneciente al g�nero Musa, subgrupo Pl�tanos cv Hart�n. La misma se acondicion�, de manera de uniformizar el material all� sembrado y garantizar el efecto de los diferentes tratamientos a aplicar. Luego se realiz� un censo de las malezas y se determin� el �ndice de dominancia en base a la frecuencia y la densidad/m². Se establecieron parcelas de 15 m de largo por 15 m de ancho (225 m²) con un promedio de 29 plantas (1309 plantas/ha). El dise�o experimental fue un bloques al azar con seis tratamientos de limpia manual y cinco repeticiones.

Los tratamientos probados fueron los siguientes:

Limpio todo el tiempo

Limpio cada mes

Limpio cada dos meses

Limpio cada tres meses

Limpio cada cuatro meses

Limpio cada cinco meses

Las variables evaluadas fueron las siguientes: a) N�mero de hojas funcionales y per�metro del seudotallo (a 1 m de altura) al momento de la floraci�n. b) Ciclo del cultivo: meses a floraci�n y a cosecha. Para tomar informaci�n de �stas y las anteriores variables, se marcaron por tratamiento y se le hizo un seguimiento durante su crecimiento a once hijos tipo "puy�n" de 80 cm de altura. c) Peso del racimo, largo, n�mero de dedos, n�mero de manos y per�metro del raquis del racimo (tomadode diez cm de la primera mano). d) Dimensiones del dedo central de la segunda mano: largo interno, externo y per�metro (en el centro del dedo). e) Se estim� el rendimiento/ha/a�o en base a la producci�n de las 29 plantas de cada uno de los tratamientos durante 22 meses de cosecha (considerado �ste un lapso suficiente para medir el efecto de la competencia).

Cuadro 1. An�lisis del suelo de la zona del estudio

Resultados y discusi�n

Valor de importancia de las malezas. Se realiz� un censo de las malezas presentes en el �rea del ensayo, encontr�ndose la presencia de un total de 13 familias y 19 especies (cuadro 2). El mayor n�mero de familias (Acanthaceae, Asclepiadaceae, Convolvulaceae, Euphorbiaceae, Leguminosae, Piperaceae, Solanaceae y Urticaceae) pertenecen al tipo de hoja ancha, esto es l�gico porque se trata de una plantaci�n establecida, donde la cantidad de energ�a radiante en llegar al suelo es menor, condici�n aprovechada por esta clase de malezas para crecer y propagarse.

Las especies de malezas predominantes en �rden decreciente de importancia fueron: Commelina sp, Peperomia pellucida (L) HBK, Phyllantus niruri L.; Sarcostemma glaucum H.B.K., Crot�n lobatus L., Ixophorus unisetus (Presl) Shult, Panicum trichoides Swartz, Ipomoea spp, Euphorbia hirta L. y Momordica charantia L.; por presentar los mayores valores de frecuencia, densidad y por ende, �ndice de dominancia (cuadro 3). Aqu� se vuelve a observar c�mo las malezas m�s importantes en el ensayo fueron las de hoja ancha, pues de las 10 especies se�aladas anteriormente, 8 corresponden al tipo antes mencionado.

Cuadro 2. Malezas presentes en el �rea del ensayo.

Variables de crecimiento. En cuanto al n�mero de hojas funcionales al momento de la floraci�n, los tratamientos limpio todo el tiempo y limpio cada mes, presentaron cada uno 14 hojas; siendo estad�sticamente superiores al resto de los tratamientos. Al espaciar la frecuencia del control de las malezas a dos y tres meses, disminuye el n�mero de hojas funcionales a 13; y cuando la limpia se hizo cada cuatro meses el n�mero de hojas fue de 12. El valor m�s bajo y el cual difiri� estad�sticamente (P < .01) del resto de los tratamientos, correspondi� al tratamiento limpio cada cinco meses con 11 hojas a floraci�n. (cuadro 4).

Cuadro 3. Valor de importancia de las malezas en funci�n de su frecuencia (F) y densidad (D)

*Indica la presencia por muestra de 1 m²/tratamiento/repetici�n.

**Considerando la F x D (Densidad como caracter�stica de abundancia de la especie).

***Se refiere al di�metro del desarrollo rastrero de la especie que es decumbente.

Respecto al per�metro del seudo-tallo al momento de la floraci�n los tratamientos: limpio todo el tiempo, limpio cada mes, limpio cada dos meses y cada tres meses, se comportaron de manera similar, difiriendo del resto de los tratamientos por presentar los valores m�s altos, los cuales estuvieron en el rango de 65 a 67 cm. Mientras los valores m�s bajos fueron los de los tratamientos limpio cada cuatro meses y limpio cada cinco meses, con 61 y 56 cm de per�metro, respectivamente. (cuadro 4).

Se observa c�mo las variables de crecimiento (n�mero de hojas funcionales y per�metro del seudotallo al momento de la floraci�n) son afectadas significativamente (P < .01) de una manera l�gica por las frecuencias del control de las malezas. As�, los mejores valores para estas variables se corresponden con los menores per�odos de enmalezamiento (limpio todo el tiempo y limpio cada mes) y los valores m�s bajos pertenecen al tratamiento con mayor tiempo de enmalezamiento, es decir cada cinco meses.

Ciclo del cultivo. Los tratamientos m�s precoces en florecer fueron los de las parcelas limpio todo el tiempo y limpio cada mes; los cuales demoraron 8.3 y 8.4 meses en florecer, difiriendo del resto de los tratamientos. Los m�s tard�os fueron los tratamientos limpios cada cuatro y cada cinco meses, con 10.1 y 10.5 meses respectivamente (cuadro 5).

En cuanto a la cosecha se da la misma tendencia observada con la floraci�n, sobresalen por su precocidad y difieren del resto de los tratamientos, las plantas de los tratamientos limpio todo el tiempo y limpio cada mes, con 10.7 y 10.9 meses a cosecha. Luego sigui� un grupo homog�neo de medias, sin diferencias significativas entre ellas, con valores fluctuando entre 12.0 y 12.4 meses, pertenecientes a los tratamientos limpio cada dos, cada tres y cada cuatro meses. El m�s tard�o de todos los tratamientos contin�a siendo el limpio cada cinco meses, con 13 meses a cosecha (cuadro 5).

Se nota c�mo los menores ciclos del cultivo fueron los de los tratamientos donde existe una mayor frecuencia del control de las malezas, es decir, los tratamientos limpios todo el tiempo y limpio cada mes, en esas parcelas existe poca o ninguna competencia de las malezas y el cultivo aprovecha mejor los recursos del medio (agua, luz, nutrientes) para crecer y producir m�s r�pidamente. A medida que se van distanciando los controles se va incrementando el ciclo del cultivo, asi, cuando la limpia se realiza cada dos meses, se incrementa el ciclo del cultivo en un 12.1 %; pero este incremento se hace m�ximo, o sea 21.4 %, cuando el cultivo se limpia cada cinco meses, como consecuencia de una mayor competencia de las malezas, lo cual dificulta el crecimiento de las plantas y por ende afecta su producci�n (cuadro 5).

Cuadro 4. Efecto de la frecuencia del control manual de las malezas sobre las variables de crecimiento de pl�tano

*Medias signadas con la misma letra en sentido vertical no son significativamente diferentes al nivel del 5 % de probabilidad seg�n la prueba de Dunc�n.

Cuadro 5. Efecto de la frecuencia del control manual de las malezas sobre el ciclo del cultivo de pl�tano.

*Medias signadas con la misma letra en sentido vertical no son significativamente diferentes al nivel del 5 % de probabilidad seg�n la prueba de Dunc�n.

Peso del racimo y sus caracter�sticas. El mayor peso del racimo fue el del tratamiento limpio todo el tiempo, con 16.414 kg, difiriendo del resto de los tratamientos. Luego sigui� el tratamiento limpio cada mes con 15.681 kg de peso. As� sucesivamente, va disminuyendo el peso del racimo a medida que el per�odo de control de las malezas se alarga, lleg�ndose a presentar el menor peso del racimo (11.663 kg) cuando la limpia se hizo cada cinco meses. Es interesante observar c�mo la reducci�n en el peso del racimo se comienza a hacer notable cuando la limpia se realiza cada tres meses con una disminuci�n de 11.8 % y es m�xima (28.9 %) cuando la limpia se realiz� cada cinco meses. (cuadro 6).

Para el largo del racimo, el mejor tratamiento, y el cual difiere significativamente (P < .01)del resto, fue el limpio todo el tiempo, con 55 cm de longitud. Luego se presentaron un grupo homog�neo de medias, sin diferencias significativas entre ellas, con valores oscilando entre 53 y 50 cm, correspondientes a los tratamientos: limpio cada mes, cada dos meses, cada tres meses y cada cuatro meses. La menor longitud del racimo fue de 46 cm, del tratamiento limpio cada cinco meses. (cuadro 7)

Los mayores valores para n�mero de dedos/racimo fueron los de los tratamiento limpio todo el tiempo y limpio cada mes, con 34 y 33 dedos/racimo, respectivamente. El menor n�mero de dedos, el cual difiri� estad�sticamente (P < .01) del resto de los tratamientos fue de 27, perteneciente al tratamiento con mayor competencia: limpio cada cinco meses. (cuadro 7).

Cuadro 6. Efecto de la frecuencia del control manual de las malezas sobre el peso del racimo de pl�tano

*Medias signadas con la misma letra en sentido vertical no son significativamente diferentes al nivel del 5 % de probabilidad seg�n la prueba de Dunc�n.

El n�mero de manos/racimo present� un grupo de valores homog�neos, sin diferencias significativas entre ellos para los tratamientos: limpio todo el tiempo, limpio cada mes, cada dos, cada tres y cada cuatro meses, presentando cada uno 7 manos/racimo. El menor valor fue el del tratamiento limpio cada cinco meses, con seis manos/racimo. (cuadro 7).

Tanto para la variable per�metro del raquis del racimo como para las dimensiones del dedo central de la segunda mano, no se detectaron diferencias significativas entre los tratamientos. El per�metro del raquis flutu� entre 13 y 14 cm. El largo interno del dedo central oscil� entre 19 y 20 cm, mientras el largo externo lo hizo entre 25 y 26 cm. El per�metro del dedo central estuvo entre 13 y 14 cm (cuadros 7 y 8).

Cuadro 7. Efecto de la frecuencia del control manual de las malezas sobre las caracter�sticas del racimo de pl�tano.

* Medias signadas con la misma letra en sentido vertical no son significativamente diferentes al nivel del 5 % de probabilidad seg�n la prueba de Dunc�n.

Como se ve para el peso del racimo y gran parte de sus caracter�sticas se repite lo observado para las variables de crecimiento y ciclo de producci�n, donde destacaron los tratamientos con menos grado de competencia, es decir donde el control se realiz� con mayor frecuencia.

Costos. Se estim� el rendimiento/ha/a�o en base a la producci�n acumulada de las 29 plantas que originalmente hab�an en cada uno de los tratamientos y medida durante un lapso de 22 meses de cosecha.

La mayor producci�n/ha fue la de los tratamientos limpio todo el tiempo, limpio cada mes y limpio cada dos meses, los cuales presentaron un estimado de 20.437, 19.079 y 17.745 kg/ha/a�o, respectivamente. Pero estos tratamientos fueron los que requirieron mayor n�mero de limpias/ha/a�o: 24, 12 y 6. (cuadro 9).

Al realizar el an�lisis econ�mico en base al costo del control de las malezas, se observ� como el tratamiento que produjo el m�ximo beneficio es la limpia cada dos meses, con un ingreso marginal estimado de 456.858 Bs/ha/a�o; esto es debido porque a pesar de no presentar la m�xima producci�n su costo del control no es de los m�s elevados (40.002 Bs/ha/a�o); tal como sucede con el tratamiento limpio todo el tiempo donde el valor del control de las malezas es el m�s elevado Bs 160.008/ha/a�o, lo cual afecta negativamente, el ingreso marginal estimado por hect�rea.

El m�s bajo ingreso marginal/ha fue el del tratamiento limpio cada cinco meses con 327.475 Bs/ha/a�o, debido a su baja producci�n/ha/a�o. (cuadro 9).

Es de notar como los tratamientos m�s utilizados por los productores de la zona no resultan ser los m�s econ�micos, como son la limpia cada tres meses o cada cuatro meses.

Cuadro 8. Efecto de la frecuencia del control manual de las malezas sobre las dimensiones del dedo central de la segunda mano en pl�tano.

*Medias signadas con la misma letra en sentido vertical no son significativamente diferentes al nivel del 5 % de probabilidad seg�n la prueba de Dunc�n.

Cuadro 9. Efecto de la frecuencia del control manual de las malezas sobre el costo del control y el ingreso econ�mico/ha/a�o en pl�tano.

*Estimado en base a la producci�n acumulada/tratamiento (225 m²) a lo largo de 22 meses de cosecha.

**Calculado en base a un precio de 28 Bs/kg de pl�tano.

***Calculado en base a un costo de 6.667 Bs/ha.

Conclusiones

Se encontraron en el �rea del ensayo 13 familias de malezas, donde el mayor n�mero pertenece al tipo de hoja ancha (Acanthaceae, Asclepiadaceae, Convolvulaceae, Euphor-biaceae, Leguminoseae, Piperaceae, Solanaceae y Urticaceae). Las especies m�s abundantes en �rden descendiente de importancia fueron: Commelina sp, Peperomia pellucida (L) H.B.K., Phyllantus niruri L., Sarcostemma glaucum H.B.K., Croton lobatus L., Ixophorus unisetus (Presl) Shult, Panicum trichoides Swartz, Ipomoea spp, Euphorbia hirta L. y Momordica charantia L.

Las variables de crecimiento (n�mero de hojas funcionales y per�metro del seudotallo al momento de la floraci�n), fueron afectadas significativamente por la frecuencia del control manual de las malezas; correspondiendo los mayores valores de estas variables a los tratamientos: limpio todo el tiempo y limpio cada mes.

De igual manera fu� afectado el ciclo del cultivo, donde los tratamientos antes nombrados presentaron los menores ciclos: 10.7 y 10.9 meses a cosecha, respectivamente.

Para producci�n el mejor peso de racimo fu� el del tratamiento limpio todo el tiempo, con 16.414 kg de peso, sigui�ndole el tratamiento limpio cada mes con 15.681 kg luego el tratamiento limpio cada dos meses con 15.062 kg. La producci�n estimada/ha/a�o de los anteriores tratamientos (en base a 22 meses de cosecha de las 29 plantas/parcela) fu� de 20.437, 19.079 y 17.745 kg/ha/a�o respectivamente. Sin embargo, el an�lisis econ�mico realizado en base al costo del control de las malezas arroj� que el m�ximo beneficio se obtuvo con el tratamiento limpio cada dos meses, con un ingreso marginal estimado de 456.858 Bs/ha/a�o (ya que s�lo requiri� 6 limpias/a�o).

La frecuencia del control de malezas afect� significativamente las variables: largo del racimo, n�mero de dedos y manos/racimo. Pero no lo hizo para el per�metro del raquis del racimo y dimensiones del dedo central de la segunda mano.

Agradecimiento

Al Sr. Leonel Mor�n y su hijo Ing. Leonardo Mor�n, propietarios de la finca "Las Trece", por todo el apoyo recibido durante la realizaci�n del ensayo. Al Prof. Ruddy Villalobos por el asesoramiento estad�stico. Al Consejo de Desarrollo Cient�fico y Human�stico de la Universidad del Zulia por el financiamiento a esta investigaci�n.

Literatura citada

1. Graterol, J., E. Fuenmayor, D. Govea y A. G�mez. 1991. Caracterizaci�n del sistema de producci�n de pl�tano de la micro-regi�n Chama, zona sur del Lago de Maracaibo. En: Memorias IX Reuni�n de la Asociaci�n para la Cooperaci�n en la Investigaci�n del Banano en el Caribe y Am�rica Tropical, M�rida, Venezuela, 1985. Maracaibo. p. 427-438.

2. Kijewski, J., J. M. Colina, P. Steegmayer y A. Madero.1981. Estudio de suelos semidetallado. Sector r�o Mucujepe-r�o Escalante, zona sur del Lago de Maracaibo. Serie Informes T�cnicos: IT-156. Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (MARNR). Maracaibo. Venezuela. 283 p.

3. Ndubizu, T. O. 1985. Weeding regimens suitable for "False Horn" Plantain. In: Proccedings of the 3rd. International Cooperation for Effective Plantain and Banana Research Meeting, Abidjan-Ivory Coast, 1985. p. 118-122.

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5. Seeyave, J. and A. Phillips. 1970. Effect of weed competition growth, yield and fruit quality of bananas. Pans 16(2): 343-347.

6. Sosa, L. 1979. Problem�tica del control de malezas en plantanales de la zona sur del Lago de Maracaibo. Universidad del Zulia, Facultad de Agronom�a, Venezuela, 67 p. (Trabajo de Ascenso).

7. Sosa, L. 1987. Efecto de la competencia de las malezas en el establecimiento del cultivo del pl�tano. En: Memorias VII Reuni�n de la Asociaci�n para la Cooperaci�n en la Investigaci�n del Banano en el Caribe y Am�rica Tropical, San Jos�, Costa Rica, 1985. Turrialba, CATIE. p. 243-250.

8. Sosa, L. 1989. Determinaci�n del per�odo cr�tico de competencia de las malezas en el cultivo del pl�tano (Musa AAB). En: Memorias VIII Reuni�n de la Asociaci�n para la Cooperaci�n en la Investigaci�n del Banano en el Caribe y Am�rica Tropical, Santa Marta, Colombia. 1987. Medell�n, Colombia. 1987. Medell�n, Colombia. Augura. p. 513-528.