Rev. Fac. Agron. (LUZ). 1999, 16: 89-98

Evaluacion de la suplementacion con bloques multinutricionales en un sistema de produccion ovina II. Par�metros ruminales y niveles de urea en plasma

Effect of multinutrient blocks suplementation with in a sheep production system II. Ruminal parameters and blood urea levels

Recibido el 24-03-1998 l Aceptado el 23-11-1998
1. Centro de Bioqu�mica Nutricional. C�tedra de Bioqu�mica. Facultad de Ciencias Veterinarias. Universidad Central de Venezuela. Maracay. Venezuela. e-mail: [email protected]
2. Instituto de Producci�n Animal. Facultad de Agronom�a. UCV. Apartado de Correos 4579 Maracay. Venezuela. Fax: 043-454120. e-mail: jcombell@ telcel.net.ve

E. Rueda1 y J. de Combellas2

Resumen

A f�n de evaluar el efecto de la suplementaci�n con bloques multinutricionales en corderos en crecimiento se realiz� un experimento con 68 animales que fueron estabulados en corrales durante 112 d�as, recibieron una dieta basal de Cynodon dactilon y fueron asignados al azar a dos tratamientos: suplementaci�n con 200 g/d de concentrado (T1) y suplementaci�n con bloques multinutricionales (T2). Al final del ensayo se tomaron muestras de sangre y licor ruminal a 6 corderos de cada tratamiento en las horas 0,3 y 7 despu�s de ofrecido el heno. No se presentaron diferencias significativas en el consumo total de materia seca, siendo de 453 g/d en T1 y 499 g/d en T2. El consumo de bloques fue de 193 g/animal/d�a. Las ganacias en peso de los corderos fueron bajas con valores muy semejantes en ambos tratamientos (12 g/d). Los niveles de urea en plasma presentaron diferencias significativas (P< 0,01) con valores para las horas 0, 3 y 7 de 27,7; 29,3 y 38,7 mg/100 mL (T1) y 38,9, 43,4, 55,7 mg/100 mL (T2). El nitr�geno amoniacal en el l�quido ruminal fue diferente (P<0,01) en las horas 0 y 3 postprandial, con valores de 119,4 y 284,2 (T1) y 169,1 y 228,8 mg/L (T2). Se concluy� que a�n cuando los corderos suplementados con bloques tuvieron una mejor distribuci�n del contenido de nitr�geno amoniacal durante el d�a, no mejoraron el consumo total de materia seca ni su comportamiento productivo en comparaci�n con los corderos suplementados con concentrado.
Palabras clave: bloques multinutricionales, corderos, nitr�geno amoniacal, urea en plasma.

Abstract

A trial was conducted to assess the effect of suplementing diets fed to sheep with multinutrient blocks (MB). The study was carried out on a commercial sheep farm located near Villa de Cura, Estado Aragua. The animals were housed as a group and fed a basal diet (B) consisting of Cynodon dactylon hay ad libitum.. A completely randomized design was used. 68 weaned lambs were assigned at two treatments for 112 days: suplementation with 200 g/d of concentrate (T1) and multinutrient block ad libitum (T2). The MB consumption was 192,8 gDM/animal/day without significative difference in DM consumption, wich was 452.6 g/d (T1) and 499.4 g/d (T2). Blood urea levels were different (p<0.01) on 0, 3 and 7 hours after feeding resulting follow values: 27.72 � 8.34 ; 29.28 � 6.00 ; 38.70 � 10.26 mg/100 mL in T1 and 38.88 � 7.08 ; 43.38 � 4.26 ; 55.74 � 11.52 mg/100 mL in T2. Ammonia nitrogen content in rumen was different (p<0.01) on 0 and 3 hours after feeding, with values of 119.37 � 42.15; 284.20 � 59.87 in T1 and 169.10 � 41.55; 228.78 � 26.30 mg/l in T2. It was concluded that MB suplementation to weaned lambs produced higher levels of rumen ammonia nitrogen, although no additional improvement in performance was observed.
Key words: multinutrient blocks, lambs, ruminal ammonia, blood urea.

Introducci�n

Los bloques multinutricionales han sido llamados tradicionalmente bloques de melaza-urea, debido a que su prop�sito fundamental es suministrar una fuente de nitr�geno no prote�co de r�pida degradaci�n a nivel ruminal (urea), acompa�ada de una fuente de energ�a y esqueletos de carbono (melaza) de tal manera que los microorganismos puedan hacer un uso eficiente de ambos elementos para la bios�ntesis de sus correspondientes amino�cidos y prote�nas. El principal objetivo de los bloques multinutricionales es asegurar un nivel �ptimo y sostenido de nitr�geno amoniacal ruminal, con el fin de asegurar una s�ntesis eficiente de amino�cidos y, por ende, de prote�na microbial y provocar modificaciones en las proporciones relativas de los microorganismos ruminales, disminuyendo la poblaci�n de protozoarios cuyos sustratos preferidos son los az�cares y almidones, e incrementando la poblaci�n bacteriana, aportando m�s energ�a y prote�na al rumiante. En el rumen, este aumento en la poblaci�n bacteriana se traducir� en una mejor digestibilidad de la dieta basal fibrosa, provocando un mayor consumo y, por ende, una mejor respuesta productiva (14). El objetivo del presente trabajo fue determinar el efecto de suplementar con bloques multinutricionales sobre las ganancias de peso, los niveles de urea en sangre y nitr�geno amoniacal en el l�quido ruminal de corderos alimentados con heno de C. dactylon.

Materiales y m�todos

Ubicaci�n. El ensayo se realiz� en la finca "Los Bagres", municipio Ezequiel Zamora, Villa de Cura, estado Aragua.

Animales. Se utilizaron 68 corderos con un peso inicial promedio de 13 kg (32 machos y 36 hembras) hijos de ovejas tropicales y padres de raza Bergamasca, cada cordero constituy� una unidad experimental.

Manejo y alimentaci�n. Los animales permanecieron estabulados durante todo el ensayo en corrales colectivos techados (un corral para cada tratamiento). Recibieron una dieta basal de heno de Cynodon dactylon , agua fresca y fueron desparasitados con Panacur� (Albendazol) utilizando 5 mL/75 Kg P.V. al inicio del ensayo, el cual tuvo una duraci�n de 112 d�as con una semana de pre-ensayo para el acostumbramiento de los animales al consumo de bloques.

Preparaci�n de los bloques multinutricionales y del concentrado. Los bloques multinutricionales fueron elaborados artesanalmente en la Secci�n de Ovinos del Instituto de Producci�n Animal (IPA), Facultad de Agronom�a, UCV. En una jornada de trabajo se preparaban 500 Kg de mezcla para elaborar aproximadamente 65 bloques multinutricionales. Las materias primas fueron adicionadas a una mezcladora mec�nica en el orden siguiente: excretas de aves, harina de ma�z, heno molido. Una vez que la mezcla fue homogeneizada, se adicion� la melaza en peque�as porciones, agitando permanentemente.

Finalmente, se agreg� una pre-mezcla conteniendo el resto de los ingredientes: cal, urea, minerales y sal. La mezcla final fue vertida en una batea dise�ada para tal fin y luego transvasada a tobos donde se compactaba mediante el empleo de una mandarria com�n, procurando mantener un mismo grado de compactaci�n del bloque. Despu�s de esto, los bloques ya elaborados fueron extra�dos de las cubetas, colocados en lugar seco y ventilado para ser transportados a la unidad de producci�n.

El alimento concentrado era elaborado en la misma unidad de producci�n ya que �ste constitu�a el suplemento com�n para todos los animales del reba�o. La composici�n de los suplementos se presenta en el cuadro 1.

Tratamientos. Se asignaron 16 machos y 18 hembras, de manera completamente aleatorizada, a cada uno de los siguientes tratamientos, haciendo un total de 34 repeticiones/tratamiento: T1 = Alimento concentrado (200 g/animal/d�a). T2 = Bloque multinutricional a voluntad.

Mediciones

Pesaje de corderos. Se realiz� quincenalmente con ayuda de un peso de reloj con capacidad de 30 kg .

Consumo de materia seca. Se estim� el consumo de heno a trav�s del pesaje diario del material ofrecido una vez al d�a (7:00 a.m.) y la diferencia con el material rechazado colectado y pesado justo antes del ofrecido al d�a siguiente. En T2 el consumo de bloques se estim� a partir de esta misma relaci�n pero en intervalos variables entre 5 y 7 d�as.

Cuadro 1. Composici�n de los suplementos (%).

Componentes Concentrado  Bloque
Melaza  35 35
Excretas de aves 20  25
Urea 0 5
Minerales 5
Harina de ma�z 34 10
Heno molido 5
Cal 0 10
Sal  0 5
Harina de coco 10 0

Cargas parasitarias. Se tomaron muestras de heces directamente del tracto rectal al inicio, intermedio y final del ensayo, utilizando bolsas pl�sticas previamente identificadas con el n�mero de cada animal. Las muestras tomadas eran trasladadas en fr�o a la Secci�n de Ovinos, IPA, para ser procesadas a trav�s de la t�cnica de McMaster modificada (10), con el fin de identificar y cuantificar par�sitos gastrointestinales presentes.

Urea en plasma. En el d�a 105 se tomaron muestras de sangre de la vena yugular a las horas cero, tres y siete despu�s de ofrecido el heno en seis machos de cada tratamiento. Las muestras fueron colectadas en tubos de vidrio con tap�n de hule conteniendo heparina como anticoagulante y trasladadas en fr�o al Laboratorio de Nutrici�n Animal del IPA procedi�ndose a la determinaci�n de urea a trav�s de la reacci�n de Berthelot modificada con el uso de un Kit Bio M�rieux proporcionado por la Agencia Internacional de Energ�a At�mica (1).

Determinaci�n de nitr�geno amoniacal en l�quido ruminal. En el d�a 105 se tomaron muestras de licor ruminal a las horas cero y tres, despu�s de ofrecido el heno, con el uso de un abreboca y una sonda esof�gica en los mismos 6 animales que fueron muestreados para urea en plasma. El l�quido fue colectado en frascos de pl�stico previamente identificados, a�adi�ndose 8 gotas de �cido sulf�rico al 97%, tapados de inmediato y trasladados en fr�o para ser almacenados a - 15�C. Al momento del an�lisis, las muestras de liquido ruminal fueron descongeladas. Se tom� una al�cuota de 10 mL a la cual se a�adi� 20 mL de hidr�xido de sodio al 45%. Posteriormente se someti� a destilaci�n en micro Kjeldahl hasta obtener 50 mL del destilado en una fiola que conten�a 10 mL de �cido b�rico al 4%, procedi�ndose a la titulaci�n con HCl 0,1 N (1).

An�lisis qu�mico. Muestras del heno consumido, concentrado y bloque multinutricional, debidamente secadas en estufa a 60 �C por 48 horas y molidas en un molino de martillo, fueron enviadas al Laboratorio de Nutrici�n Animal del IPA,FAGRO,UCV donde se realiz� el an�lisis qu�mico determin�ndose valores de nitr�geno total (1), extracto et�reo (1), fibra detergente neutro (FDN) (5), calcio y f�sforo por espectrofotometr�a (3,4).

An�lisis estad�stico. Los datos fueron procesados a trav�s del programa Statistix 4.0. Se realizaron pruebas de normalidad de Wilk-Shapiro, homogeneidad de varianza, analisis de varianza de una sola v�a, pruebas de medias de Tukey y estad�stica descriptiva. Los datos correspondientes a las cargas parasitarias fueron analizadas �nicamente a trav�s de la estad�stica descriptiva, ya que no cumplen con los supuestos b�sicos del ANAVAR (15).

Resultados y discusi�n

Consumo de materia seca. En el cuadro 2 se presentan los valores de consumo de materia seca. No se encontraron diferencias estad�sticamente significativas en relaci�n al consumo de la dieta b�sica. Los corderos de T1 consumieron un total de materia seca equivalente a 3,4 % de su peso vivo, y los animales del T2 consumieron el equivalente a 3,6 % de su peso vivo. El consumo de materia seca result�, en ambos tratamientos, inferior a los resultados reportados en corderos tropicales en crecimiento (9).

En los animales del T2,el consumo de bloques fue de 192,76 � 71,63 g MS/d, semejante al reportado en condiciones de pastoreo (6).

Cambios en el peso de los corderos. En el cuadro 3 se presentan los cambios de peso ocurridos durante los 105 d�as de ensayo. No se presentaron diferencias estad�sticamente significativas en ninguno de los valores. Las tasas de ganancias fueron semejantes en ambos tratamientos (12,3 g/d), manifest�ndose un bajo crecimiento. Es conocido que, en la fase post-destete, las tasas de crecimiento son inferiores a las mostradas durante la fase pre-destete, sin embargo, en el presente trabajo, estos valores se presentaron extremadamente bajos si los comparamos con las ganancias de peso post destete reportadas por otros autores en ovinos de razas tropicales, m�s a�n si consideramos que en �ste ensayo los animales proven�an del cruzamiento entre madres de raza tropical y padres de raza Europea, cuyo resultado deber�a manifestarse en un cordero con mayores ganancias en peso. No obstante, es conocido que a�n cuando algunas razas mestizas europeas son de gran tama�o, tambi�n presentan altos requerimientos nutricionales y sanitarios, siendo su crecimiento fuertemente afectado por las condiciones agroecol�gicas. Otro aspecto sobre el cual se puede inferir para la posible explicaci�n de estas bajas respuestas animales, es la carencia de alg�n factor nutricional. Por ejemplo, en rumiantes, las vitaminas A, D y E pudiesen estar en deficiencia en alg�n momento determinado, cuando la dieta no aporte los requerimientos m�nimos, ocasionando, entre otros s�ntomas, retardos en el crecimiento. A�n cuando no fue determinado el aporte de energ�a metabolizable de las dietas, es posible que este fuese deficiente en ambos tratamientos y se puede considerar, junto con las elevadas cargas de huevos de estrongilos digestivos, como otro de los factores que afectaron las ganancias de peso. Las altas cargas parasitarias que se manifestaron a pesar de que los animales fueron desparasitados al inicio del ensayo pueden ser consecuencia de un ambiente contaminado y una alimentaci�n deficiente.

Cuadro 2. Consumo de materia seca (g/d) por corderos postdestete que recibieron concentrado (T1) o bloque multinutricional (T2).

Componentes  Concentrado (T1) Bloque (T2)
Heno 288,6 � 90,00 306,7 � 95,00NS
Suplemento 164,0 192,8 � 71,63
Total 452,6 499,4
% peso vivo 3,2 3,6

NS: no significativo.

Cuadro 3. Peso (kg) y ganancia de peso (GDP) de corderos postdestete que recibieron concentrado (T1) o bloque multinutricional (T2).

Tiempo(d�as) Concentrado (T1) Bloque (T2) ANAVAR
0 12,8 � 1,56 13,4 � 1,54 NS
15 12,7 � 1,45 13,2 � 1,59 NS
30 13,3 � 1,38 13,7 � 1,63 NS
45 13,1 � 1,68 13,5 � 1,65 NS
60 13,7 � 1,79 13,9 � 2,04 NS
75 13,8 � 1,95 14,3 � 2,24 NS
90 14,0 � 2,04 14,7 � 2,49 NS
105 14,1 � 2,09 14,7 � 2,66 NS
GDP (g/d) 12,3 12,3  
G.total (kg) 1,3 1,3  

NS: no significativo.

Niveles de urea en plasma sangu�neo. En el cuadro 4 se presentan los niveles de urea en plasma. En T1, los valores de urea en las horas 0, 3 y 7 despu�s de ofrecida la dieta del d�a, se ubican dentro de los rangos considerados normales para estos animales. Por el contrario, en T2, los niveles de urea a partir de la hora 3 post-pandrial sobrepasan los l�mites establecidos, llegando a 55,74 mg/dL en la hora 7 post-pandrial. En ambos tratamientos, los valores son superiores a los reportados en corderos de 21 kg con diferentes tipos de suplementos nitrogenados (9). No obs-tante, los animales del ensayo no mostraron signo de toxicidad fuerte caracter�sticos de la intoxicaci�n por urea, como son: convulsiones, p�rdida de la visi�n y/o muerte, aunque es posible que las bajas ganancias en peso hayan sido producto de una leve intoxicaci�n por exceso de urea, atribu�das al gasto de energ�a adicional requerida en forma de ATP para sintetizar las mol�culas de urea y por la reducci�n de intermediarios anfib�licos, cuyas implicaciones son m�s graves si la dieta es deficiente en energ�a y si el estado fisiol�gico del animal demanda grandes cantidades de energ�a para las funciones de crecimiento, reproducci�n o lactancia (7, 11).

Cuadro 4. Niveles de urea (mg/dL) en plasma de corderos estabulados alimentados con heno de Cynodon dactylon y recibiendo suplementaci�n con concentrado (T1) o bloque multinutricional (T2).

Tiempo1 Concentrado (T1) Bloque (T2)
Hora 0 27,72a � 8,34 38,88b � 7,08
Hora 3 29,28a � 6,00 43,38b � 4,26
Hora 7 38,70a � 10,26 55,74b � 11,52

1/ Despu�s de recibir el alimento del d�a. a,b: letras diferentes entre columnas indican diferencias significativas (P < 0,01 ).

Nitr�geno amoniacal en l�quido ruminal. En el cuadro 5 se presentan los datos relativos a las concentraciones de nitr�geno amoniacal en el l�quido ruminal (NAR) de los corderos alimentados con heno de Cynodon dactylon y suplementados con alimento concentrado (T1) o con bloques multinutricionales (T2). La suplementaci�n con concentrado (T1) permiti� sostener adecuados niveles de NAR para optimizar la digestibilidad de la materia org�nica, inclusive hasta la hora cero, correspondiente al momento justo antes de recibir la dieta diaria (119,37 mg/L). En la hora tres despu�s de recibir el alimento, el NAR aument� hasta un promedio de 284,20 mg/L present�ndose un pico caracter�stico de las dietas que reciben suplemento nitrogenado en una sola dosis. Este valor es superior a los reportados con diferentes tipos de suplementos nitrogenados y est� por encima del nivel considerado �ptimo para maximizar el consumo de dietas fibrosas de baja calidad (8, 9, 13).

Cuadro 5. Contenido de nitr�geno amoniacal (mg/L) en l�quido ruminal de corderos estabulados alimentados con heno de Cynodon dactylon y recibiendo suplementaci�n con concentrado (T1) o bloque multinutricional (T2).

Hora postpandrial Concentrado (T1) Bloque (T2)
0 119,37a � 42,15 169,10b � 41,55
3 284,20a � 59,87 228,78b � 26,30

a,b: letras diferentes entre columnas indican diferencias significativas (P < 0,01 ).

En los animales del T2, se puede observar una mejor distribuci�n del patr�n amoniacal: no se present� un pico tan pronunciado en la hora 3 y el nivel disminuy� hasta 169,10 mg/L en la hora 0. A pesar de los valores relativamente altos de urea en plasma, los resultados obtenidos en relaci�n al contenido de N-NH3 en l�quido ruminal fueron inferiores a los resultados obtenidos en corderos de 21 kg (9), aunque superiores a los presentados en ovejas estabuladas recibiendo dieta basal de cogollo de ca�a suplementada con bloques multinutricionales con 6% de urea (13). Es posible que el nitr�geno amoniacal presente en el l�quido ruminal haya sido superior al requerido por las bacterias originando niveles relativamente elevados de urea circulante en el plasma sangu�neo.

Identificaci�n y cuantificaci�n de par�sitos gastrointestinales. En el cuadro 6 se presenta la relaci�n de corderos infestados y no infestados al inicio, a los 60 d�as y al final del ensayo (105 d�as). El n�mero de corderos infestados al inicio fue inferior en los animales del T2 (26,5%), semejante en ambos tratamientos a los 60 d�as (41,2%) y ligeramente superior en los animales del T1 a los 105 d�as, donde se manifest� un 55,9% de corderos infestados. Sin embargo, ya que la relaci�n de corderos infestados no es un buen indicativo del estado parasitario del reba�o, se identificaron y cuantificaron los par�sitos presentes en las heces de cada animal. Se identificaron ooquistes de Coccidias y estrongilos digestivos en cantidades altamente variables entre individuos. En el cuadro 7 se presentan valores m�nimos y m�ximos del n�mero de huevos de par�sitos encontrados por gramo de heces. Al inicio del ensayo no se encontr� infestaci�n parasitaria en el 67,7% de los corderos del T1 y en el 73,5% de los corderos del T2. Los valores m�ximos de coccidias fueron de 5650 (T1) y 6500 (T2) huevos/g de heces.

Cuadro 6. Relaci�n de corderos infestados alimentados con heno de Cynodon dactylon y recibiendo suplementaci�n con concentrado (T1) o bloque multinutricional (T2).

Variables Concentrado (T1) Bloque (T2)
D�as de ensayo 60 105 0 60 105
Total borregos 34 34 34 34 34 34
Borregos infestados (n) 11 14 19 9 14 16
(%) 32,3  41,2 55,9 26,5 41,2 47
Borregos no infestados (n) 23  20 15 25 20 18  
(%) 67,7 58,8 44,1 73,5 58,8 53

Cuadro 7. Valores m�nimos y m�ximos de los huevos de par�sitos gastrointestinales (No de huevos / g de heces) en corderos postdestete estabulados alimentados con heno de Cynodon dactylon y recibiendo suplementaci�n con concentrado (T1) o bloque multinutricional (T2).

Variables Concentrado (T1) Bloque (T2)
D�as de ensayo 0 60 105 0 60 105
Estrongilos
M�nimo 0 0 0 0 0 0
M�ximo 100 49150 8600 50 7950 2700
Coccidias
M�nimo 0 0 0 0 0 0
M�ximo 5650 500 700 6500 2450 550

A los 60 d�as de ensayo, la m�xima carga fue de 500 y 2450 coccidias/g de heces en T1 y T2, respectivamente. Se presentaron altas cargas de estrongilos digestivos, con valores de 2742,4 � 8970,07 y 1008,1 � 2014,12 huevos de estrongilos/g de heces en T1 y T2, respectivamente. La gran variabilidad entre individuos indica que hubo animales muy infestados, lo que influy� sobre el comportamieno productivo de los corderos. Trabajos anteriores (2) indican que los corderos son capaces de tolerar altas cargas de coccidias sin que ocurran grandes p�rdidas de peso o reducci�n en las ganancias de peso, si la dieta es de buena calidad, pero no toleran altas cargas de estrongilos sin que se produzcan reducciones en las ganancias de peso. Al final del ensayo, a los 105 d�as, aument� la proporci�n de corderos infestados en ambos tratamientos, siendo 19% (T1) y 16% (T2) y se detectaron hasta 700 y 550 huevos de coccidias/g de heces en T1 y T2. Las cargas de estrongilos se redujeron en ambos tratamientos hasta valores promedios de 815 y 235 ooquistes/g de heces en T1 y T2, respectivamente, pero a�n as�, siguen consider�ndose elevadas, y contribuyen a explicar las bajas tasas de crecimiento encontradas en el presente trabajo.

Conclusiones

Se concluy� que los bloques multinutricionales no mejoraron el comportamiento productivo en corderos en crecimiento postdestete a�n cuando aumentaron los niveles de nitr�geno amoniacal en el l�quido ruminal y la concentraci�n de urea en plasma. Se identificaron huevos de coccidias y estrongilos digestivos en las heces de los corderos , en cantidades altamente variables. Las altas cargas de estrongilos pudieron afectar el crecimiento de los corderos.

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