Rev. Fac. Agron. (LUZ). 1999, 16: 141-151
Dinámica de acumulación de materia seca en la planta de tomate (Lycopersicon
esculentum Miller), cv. Río Grande, en la zona noroccidental del estado Zulia,
Venezuela1
Dry matter accumulation dynamics in tomato (Lycopersicon esculentum Miller), cv. Río Grande, in the norwestern area, state of Zulia, Venezuela
Recibido el 09-05-1997 l Aceptado
el 14-05-1998
1. Trabajo financiado por el Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico (CONDES) de
La Universidad del Zulia (LUZ) (Proyecto No. 725-90) y el Consejo Nacional de
Investigaciones Científicas (CONICIT) (Proyecto S1-2381).
2. Egresado de la Facultad de Agronomía, La Universidad del Zulia.
3. Departamento de Botánica, Facultad de Agronomía, La Universidad del Zulia, Apartado
15205, Maracaibo 4005, Zulia. Venezuela. Teléfono: 58 61 596303
4. Departamento de Estadística, Facultad de Agronomía, La Universidad del Zulia,
Apartado 15205, Maracaibo 4005, Zulia. Venezuela.
D. Chirinos-Torres2, L. Chirinos-Torres2, M.
Marín3, Z. Román-Urbina2, J. Vielma-Baptista2 y C.
Castro, 4
Resumen
Se estudió la dinámica de acumulación de materia seca (MS) en
plantas de tomate cv. Río Grande en la zona noroccidental del estado Zulia, Venezuela,
durante el período diciembre1992-abril 1993. Se realizaron siete muestreos en total
tomando seis plantas/muestreo, en intérvalos de 15 días, discriminando MS por órgano
sin incluir raíces. Todos los órganos siguieron una curva de crecimiento sigmoidal,
excepto inflorescencias, folíolos y raquis de hojas del tallo. La máxima acumulación de
MS ocurrió a los 120 días (478,57 g), al igual que en el tallo (16,87 g), ramas (84,86
g) y frutos (300,96 g). Los porcentajes de MS declinaron hacia el final del ciclo, siendo
diferente en ramas y frutos.
Palabras clave: Lycopersicon esculentum, acumulación, materia seca.
Abstract
Dry matter (DM) accumulation dynamics were studied for field grown
tomatos cv. Río Grande in the norwestern area, State of Zulia, Venezuela, during the
perrod from december 1992 april 1993, through seven fortnight samples (six plants/sample).
DM was classifred by plant parts (root not included). Except for inflorescences rachis and
folioles of stem leaves, all the organs followed sigmoidal DM accumulation curves. Maximun
total DM accumulation (478.57 g) was reached after 120 days; and also in the stem (16.87
g) and fruits (300.96 g). Stem DM percentage of total DM declined by the end of the crop
cycle prentrimy diflerences in branche and fruit measuremests.
Key words: Lycopersicon esculentum, accumulation, dry matter.
Introducción
La importancia del cultivo en la zona fue detallada por Chirinos et
al. (5). La dinámica de acumulación de materia seca indica el crecimiento de las
plantas; así, se puede determinar la duración de cada una de las fases, es decir, el
crecimiento vegetativo, floración, fructificación y senescencia. Esto es fundamental
para el tomate, como en cualquier otro cultivo, que requieren de oportunos manejos
agronómicos para maximizar su producción (5). Dichos manejos deben fundamentarse en el
comportamiento ecofisiológico y/o la estrategia de desarrollo de la planta debido a que
los requerimientos de la misma están en función de la fase de crecimiento en que se
encuentre (5,7). En el caso de la protección vegetal, es importante para mantener el
efecto de competidores biológicos (5).
En general, dentro de la tendencia de crecimiento de plantas, se tiene
primero el crecimiento vegetativo, donde se forma su aparato fotosintético, luego pasa a
la fase reproductiva y posteriormente ocurre la senescencia. Dependiendo de la etapa de
desarrollo, la materia seca acumulada se distribuye de manera diferente en cada uno de los
órganos de la planta (7).
Este trabajo se realizó con la finalidad de determinar la dinámica de
acumulación de la materia seca en la planta de tomate, cv. Río Grande, así como en sus
órganos, a lo largo de su ciclo de producción, bajo las condiciones de manejo
agronómico de la zona, al noroeste del estado Zulia y de esta manera complementar la
información existente, de otros estudios realizados en la zona (5).
Materiales y métodos
El trabajo de campo se realizó en el período diciembre 1992-abril
1993, en la Agropecuaria «El Carnaval», ubicada en el municipio Páez, estado Zulia,
Venezuela. Esta zona se caracteriza por pertenecer a un Bosque muy Seco Tropical (8) y los
suelos son Typic Ustropepts (4).
El cultivar utilizado fue Río Grande, el comúnmente sembrado en la
zona (5). El semillero se sembró al voleo. Cuando las plantas tenían aproximadamente un
mes, fueron transplantadas a un lote de 300 m2 con una distancia de 0,5 m.
entre plantas y 1,5 m. entre hileras. Con el aporque (15 días postransplante) se
fertilizó con 12-12-24 (800 kg/ha) y al inicio de la floración se aplicó úrea a una
dosis de 100 kg/ha. En semillero las plantas fueron regadas diariamente con manguera. En
el campo se regó por surcos con tapas a una frecuencia de 2-3 días.
El control de malezas se realizó aplicando GramoxoneÒ a una dosis de 2 L/ha y Hl-2000Ò (selectivo para gramíneas) a razón de 1 L/ha. Durante el estudio no se consideró
necesario el control de insectos plagas.
Se realizaron siete muestreos (uno quincenalmente), iniciados a partir
del aporque (15 días después del transplante), con el fin de evitar el estrés de
adaptación que sufre la planta cuando se realiza la práctica del transplante (9). En
cada muestreo se seleccionaron seis plantas al azar, cortadas al ras del suelo, las cuales
fueron colocadas individualmente en bolsas plásticas y transportadas en cavas
refrigeradas portátiles hasta el laboratorio del Instituto de Investigaciones
Agronómicas (IIA) de la Facultad de Agronomía de La Universidad del Zulia.
En el laboratorio, las plantas fueron separadas en sus diferentes
órganos y partes. Las hojas fueron separadas en folíolos y raquis discriminados a su vez
en los que corresponden al tallo y a las ramas. Así se separaron folíolos de hojas del
tallo (FHT) y de las ramas (FHR) como también los raquis del tallo (RHT) y de las ramas
(RHR). Los frutos fueron divididos como bayas y restos de frutos (RF: restos de cáliz,
corola y pedúnculos) (3). También fueron separadas las inflorescencias. Posteriormente
se llevaron a la estufa a una temperatura de 60°C hasta alcanzar peso constante para
obtener el peso parcialmente seco (5). El material parcialmente seco fue molido, tomando
muestras de 0,5 g las cuales fueron colocadas en la estufa a 105°C durante 5 horas (2),
obteniéndose el peso seco, para cada intérvalo de tiempo (12).
Las variables estudiadas fueron: cantidad de materia seca o peso seco
total de la planta, por parte y órgano (g) y proporción de materia seca de cada órgano,
con respecto al peso seco total de la planta, representado en porcentaje.
Los análisis se realizaron con el paquete estadístico SAS (14) a
través de un modelo jerarquizado y las comparaciones a través de las medias mínimas
cuadráticas para las diferentes partes y la prueba de Tukey para las diferentes edades de
la planta.
Resultados y discusión
La figura 1 muestra el patrón de crecimiento de la planta de tomate,
en términos de peso seco. Allí se observa que dicho patrón siguió una curva sigmoidal
simple (5, 11), al igual que otros cultivos (1, 10, 13). Durante el período 45-75 días
el crecimiento fue moderado, incrementándose luego rápidamente hasta alcanzar su máximo
a los 120 días. Posteriormente la curva decayó, correspondiéndose esto con la etapa de
senescencia. Chirinos et al. (5) reportaron similares tendencias de crecimiento,
para el mismo cultivar, aunque limitados debido a problemas de déficit hídrico
presentados durante la conducción de ese estudio. Los cuadros 1 y 2 presentan la materia
seca de las partes, a diferentes edades de la planta y sus diferencias, las cuales fueron
detectadas por el análisis de la varianza y corroboradas por las pruebas de medias. Allí
podemos observar que todas las partes aumentaron su materia seca durante el desarrollo,
siendo las hojas (folíolos + raquis) el mayor componente del cuerpo de la planta (5),
hasta los 105 días, para luego ser los frutos (bayas + restos de frutos).
Cuadro 1. Contenido de materia seca (g) en la planta de tomate de
acuerdo a la edad (Lycopersicon esculentum Miller) creciendo bajo condiciones de
campo.
Edad |
45 |
60 |
75 |
90 |
105 |
120 |
135 |
Peso seco (g) |
1,92e |
25,03de |
85,52d |
273,44c |
380,22b |
478,57a |
245,32c |
a, b, c, d, e: medias con letras iguales no difieren significativamente
(P<0,05). Comparaciones de peso seco total promedio de la planta para las diferentes
edades a través de la prueba de Tukey.
La figura 1 muestra además que el tallo tuvo un crecimiento acelerado
en el período 45-90 días, estabilizándose al final del ciclo; inicialmente, la planta
tiende a crecer más en longitud. En el período 45-60 días, aparecen las ramas y al ir
aumentando las ramificaciones, aumenta también el crecimiento de hojas. Las ramas
alcanzan su máximo peso a los 120 días (cuadro 3). Chirinos et al. (5) refieren
que el crecimiento en el tallo y ramas tuvo un aumento leve en los primeros 45 días y su
incremento se hizo notorio a partir de los 60 días, lo que coincide con estos resultados.
Asimismo señalan que el incremento de la biomasa estuvo asociado con el incremento de las
ramificaciones.
El tallo representó el 25,07% del peso total a los 45 días (cuadro
3). Este porcentaje disminuyó a partir de los 60 días. Las ramas a los 60 días
representaron el 6,07% aumentando luego a 17,64% (75 días), disminuyendo gradualmente
hasta los 105 días (13,55%).
En cuanto a los FHT y RHT (figura 2), ambos siguieron la misma
tendencia (curva doble sigmoide). Estos presentaron un incremento acelerado en el período
45-60 días. En esta etapa, las hojas del tallo representaron el principal órgano
vegetativo de la planta, cuya actividad fotosintética es la base de su crecimiento para
luego dar paso al desarrollo de otros órganos. Posteriormente su crecimiento disminuyó
(período 60-75 días); en esta etapa aumentaron las ramificaciones en la planta. El
crecimiento en los FHT y RHT aumentó nuevamente para llegar a su máximo a los 105 días.
Sin embargo, este crecimietno se mantuvo por debajo del crecimiento de FHR y RHR.
Los FHR y RHR mostraron similar comportamiento entre sí (sigmoidal
simple), tal como se observa en la figura 2, siendo diferente al de FHT y RHT. El
crecimiento de FHR y RHR inicialmente es bajo en comparación con el de FHT y RHT,
incrementándose luego, debido al aumento de las ramificaciones. En términos de
porcentaje (figura 3), las hojas de las ramas presentaron su máximo valor a los 75 días,
disminuyendo luego gradualmente. El crecimiento de las hojas tiene gran influencia en el
crecimiento total de la planta lo cual es de esperarse por su porte de tipo herbáceo (9).
Cuadro 2. Contenido de materia seca (g) en las diferentes partes de
la planta de tomate (Lycopersicon esculentum Miller) creciendo bajo condiciones de
campo.
Edad (días) |
FHT |
RHT |
FHR |
RHR |
TALL |
INF |
RAM |
RF |
BAY |
45 |
0,93a |
0,29a |
- |
- |
0,48a |
0,22a |
|
|
|
60 |
9,87a |
3,57a |
3,39a |
0,97a |
4,59a |
0,14a |
1,52a |
0,62a |
0,36a |
75 |
4,69b |
2,54b |
24,78a |
8,95b |
6,88b |
0,68b |
15,09a |
2,66b |
19,25a |
90 |
9,72d |
4,93d |
64,95b |
29,82c |
15,47c |
|
43,10c |
8,91d |
96,54a |
105 |
10,28e |
5,81e |
67,85b |
33,94d |
15,84e |
|
51,52c |
10,21e |
184,77a |
120 |
|
50,01c |
25,87d |
16,87d |
|
84,86b |
14,91d |
286,05a |
|
135 |
|
16,24c |
8,77c |
14,16c |
|
64,30b |
10,67c |
131,18a |
|
FHT= Folíolos de hojas del tallo; RHT= Raquis de hojas del tallo; FHR=
Folíolos de hojas de ramas; RHR= Raquis de hojas de ramas; TALL= Tallo; INF=
Inflorescencias; RAM= Ramas; RF= Restos de frutos; BAY= Bayas. a, b, c, d, e: medias con
letras iguales no difieren significativamente (P<0,05). Comparaciones de medias entre
las partes de una misma edad a través de las medias mínimas cuadráticas.
Figura 1. Materia seca en la planta, tallo y ramas de tomate,
cultivado en la zona noroccidental del estado Zulia, Venezuela. Periodo diciembre
1992-abril 1993.
Figura 2. Materia seca en folíolos y raquis de hojas de tallo (FHT,
RHT) y de ramas de plantas de tomate (FHR, RHR), cv. Río Grande, cultivado en la zona
noroccidental del estado Zulia, Venezuela. Periodo diciembre 1992-abril 1993.
Comparando el crecimiento de las ramas con los FHR y RHR, los dos
últimos llegan a su máximo crecimiento a los 105 días, decayendo posteriormente. No
obstante, las ramas llegaron a su máximo a los 120 días. Este comportamiento puede
deberse a que las ramas permanecen en la planta y siguen creciendo, mientras que las hojas
se pierden debido a la senescencia inducida por la supresión del riego, como consecuencia
del manejo del cultivo que se realiza en la zona con el fin de acortar su ciclo.
Las inflorescencias (figura 4) se presentaron a partir de los 45 días
(cuadro 2). En el cuadro 3 se muestra el porcentaje representado por las inflorescencias
para las distintas edades. En el período 45-60 días, las inflorescencias disminuyeron su
crecimiento; en este momento ocurrió el cuaje de frutos. Entre los 60-75 días hubo un
incremento, que pudo deberse al desarrollo de las ramas. Chirinos et al. (6)
refieren que la mayor cantidad de inflorescencias se concentran en las ramas, cuando
éstas comienzan su crecimiento acelerado.
Los frutos (cuadro 3) se observaron a los 60 días, mostrando un
incremento notorio a partir de los 75 días, llegando a representar el 62,29% del
crecimiento total alcanzado por la planta a los 120 días (figura 3). Las bayas aumentaron
violentamente a partir de los 75 días (figura 5), alcanzando su máximo a los 120 días
(286,05 g), lo cual comparado con el total acumulado por la planta para ese momento
(478,47 g), constituyó el 58,8%. En cuanto a los RF, éstos sólo fueron superiores a las
bayas a los 45 días (cuadro 2).
Figura 3. Distribución porcentual de la materia seca en la planta
de tomate, cv. Río Grande, cultivado en la zona noroccidental del estado Zulia,
Venezuela. Periodo diciembre 1992-abril 1993.
Cuadro 3. Distribución porcentual y en peso (g) de los diferentes
órganos de la planta de tomate, cv. Río Grande, creciendo bajo condiciones de campo en
la zona noroccidental del estado Zulia, Venezuela, durante el ciclo del cultivo.
Edad |
Hojas |
Tallo |
Ramas |
Inflorescencia |
Frutos |
(días) |
Peso (g) |
% |
Peso (g) |
% |
Peso (g) |
% |
Peso (g) |
% |
Peso (g) |
% |
45 |
1,22 |
63,54 |
0,49 |
25,52 |
|
|
0,22 |
11,46 |
|
|
60 |
17,80 |
71,11 |
4,59 |
18,34 |
1,52 |
6,07 |
0,14 |
0,56 |
0,98 |
3,92 |
75 |
40,96 |
47,90 |
6,88 |
8,04 |
15,09 |
17,64 |
0,68 |
0,80 |
21,91 |
25,62 |
90 |
109,42 |
40,02 |
15,47 |
5,66 |
43,10 |
15,76 |
|
|
105,45 |
38,56 |
105 |
117,88 |
31,00 |
15,84 |
4,17 |
51,52 |
13,55 |
|
|
194,98 |
51,28 |
120 |
75,08 |
15,70 |
16,87 |
3,53 |
84,86 |
17,73 |
|
|
300,96 |
62,89 |
135 |
25,01 |
10,20 |
14,16 |
5,77 |
64,30 |
26,21 |
|
|
141,85 |
57,82 |
Figura 4. Materia seca en inflorescencias de plantas de tomate cv.
Río Grande, cultivado en la zona noroccidental del estado Zulia. Periodo diciembre
1992-abril 1993.
Figura 5. Materia seca en bayas y restos de frutos de plantas de
tomate cv. Río Grande, cultivado en la zona noroccidental del estado Zulia, Venezuela.
Periodo diciembre 1992-abril 1993.
Conclusiones
En general, la tendencia de acumulación de materia seca en la planta
de tomate así como en sus diferentes partes siguió una curva sigmoidal, excepto en FHT,
RHR e inflorescencias.
El incremento en peso se hizo notorio a partir de los 60 días,
presentándose un pico de acumulación entre los 105-120 días. El máximo crecimiento en
la planta se dió a los 120 días.
Los principales órganos de acumulación de materia seca fueron las
hojas (de ramas y de tallo), como órgano vegetativo y los frutos (bayas+RF) como órgano
reproductivo.
Los porcentajes representados por los diferentes órganos fueron
disminuyendo a lo largo del ciclo exceptuando las ramas que tendieron a mantenerse y los
frutos que aumentaron al final del mismo.
El ciclo del cultivo fue de 120-135 días, aproximadamente, para las
condiciones de estudio.
Estos resultados muestran las tendencias de crecimiento de la planta de
tomate, cv. Río Grande, bajo condiciones de manejo y producción de la zona. Similares
tendencias son observadas en el mismo cultivar, con condiciones limitadas de riego
(déficit hídrico) (5).
Agradecimientos
Los autores desean expresar su agradecimiento al Sr. José Rodríguez y
al TSU Dionel Rodríguez por facilitar su finca para la realización del ensayo. A los
bachilleres Arístides Galbán, Carlos Fernández, Romer Fuenmayor, Maribel Jiménez y
María Polanco por su colaboración en el procesamiento de las muestras. Al Prof. Francis
Geraud por facilitarnos su laboratorio y equipos para la transcripción del artículo. A
Dorys Chirinos por revisar el manuscrito.
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