Rev. Fac. Agron. (LUZ). 1999, 16: 337-355
Estudio de las densidades de población en las primeras cuatro
generaciones del plátano (Musa grupo AAB cv. Hartón)1
Study of population densities during the first four cycles of production
of plantain (Musa AAB cv Harton)
Recibido el 03-11-1997 l Aceptado
el 02-03-1998
1. Subvencionado por el Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico de la
Universidad de Los Andes (CDCHT-ULA)
2. Instituto de Investigaciones Agropecuarias. Universidad de Los Andes, Apartado
77 La Hechicera, Mérida, C. Postal 5101, Venezuela.
B. Añez2 y E. Tavira2.
Resumen
El objetivo del estudio fue medir el efecto que sobre el rendimiento y
producción del plátano (Musa Grupo AAB cv. Hartón) tuvo el empleo de diferentes
densidades de plantación. Se probaron tres distancias entre hileras -H- (2,00; 3,00 y
4,00 m), dos distancias entre plantas - P - (2,00 y 3,00 m ) y tres números de hijos por
sitio de plantación -N- (l,00; 2,00 y 3,00) en un arreglo factorial completo 3x2x3 en
bloques al azar con tres repeticiones. El trabajo de campo se realizó durante 33 meses
(junio 1993 - marzo 1996 ) en un suelo Fluventic Eutropepts, franco- limoso del municipio
Colón, estado Zulia, Venezuela. En las plantas madres, los pesos medios (kg) de los
racimos no fueron afectados significativamente por los tratamientos; mientras que, los
rendimientos (t ha-1) fueron influidos por las distancias de plantación
empleadas. A partir de la segunda generación, los pesos disminuyeron con el aumento del
número de hijos por sitio de producción; en tanto que, los rendimientos fueron afectados
por el número de hijos y por las distancias de plantación. Los rendimientos y
producción máximos fueron obtenidos con las menores distancias de plantación y con el
mayor número de hijos por sitio de producción. Los intervalos de cosecha (IC) de las
tres generaciones posteriores a las plantas madres, fueron afectados por el número de
hijos y por las distancias de plantación usadas. Al nivel uno de las distancias entre
plantas (2 m), los IC aumentaron casi 9 días con el incremento de un hijo por sitio de
producción.
Palabras clave: Musa, Grupo AAB cv. Hartón, poblaciones, rendimiento,
intervalos de cosecha.
Abstract
The objective of this study was to evaluate the effect of population
densities on yield and production of plantain (Musa AAB cv Harton). We tested three
row spacings -H- (2.00, 3.00 and 4.00 m), two intrarow plant spacings -P- (2.00 and 3.00
m) and three number of suckers per site of plantation -N- (1.00, 2.00 and 3.00) in a
complete factorial arrangement of treatments 3x2x3 in a randomized blocks design, with
three replications. The tests were carried out during 33 months (June 1993-March 1996) in
the Colon county, Zulia state, Venezuela, on a Fluventic Eutropepts, silty-loam soil. In
the first cycle of production, the average weight of the bunches (kg) was no influenced by
the treatments; meanwhile, the yields (t ha-1) were significantly affected by
the spacings of plantation used.Through next three cycles, the weights decreased with the
increase of N; meantime, the yields were influenced by H, P and N. The higher yields and
production were obtained with the lower spacings of plantation and the higher number of
suckers by site of production. The harvest intervals (HI) were affected by de number of
suckers and by the distances of plantation used. At the first level of intrarow plant
spa-cing (2 m), the HI increased almost 9 days with the increment of one sucker by site of
production.
Key words: Musa, AAB cv. Harton, population densities, yield, production,
harvest interval.
Introducción
Muchos factores pueden influir la producción de los cultivos, en este
caso, sin embargo, se considera sólo la competencia. Entendiendose como tal, "al
proceso mediante el cual dos o más organismos que viven juntos, interactúan para
conseguir parte de un factor ambiental, no disponible en cantidades suficientes, para
suplir las demandas combinadas de dichos organismos".
Durante el inicio del crecimiento de los cultivos, la cantidad de luz
que interceptan es relativamente pequeña, siendo esta, una de las mayores fuentes de
ineficiencia en los sistemas de producción vegetal. Se ha establecido que, el índice de
área foliar (IAF) debería alcanzar un valor de tres a cuatro, tan pronto como fuera
posible y luego estabilizarse. En consecuencia, las distancias de siembra pueden tener una
influencia considerable en la producción de las plantas, a través de su efecto sobre el
IAF y sobre la duración del área foliar (DAF).
En los reportes de investigaciones en bananos, se señala que el
rendimiento total se incrementa al aumentar la densidad de población. Sin embargo, el
tamaño o peso de los racimos, en la mayoría de los casos. disminuye a las mas altas
densidades. Se pregona que hay una marcada tendencia a plantar tan cerca como otras
consideraciones lo permitan. Se ha postulado también que, los rendimientos disminuyen a
partir de las plantas madres hacia los hijos y que la magnitud absoluta de tal
declinación, es mayor a medida que aumenta el número de plantas por unidad de
superficie. Por otra parte, la influencia de las densidades de población en los ciclos de
producción y cosecha ha sido pequeña para las plantas madres, pero en los hijos, los
ciclos han sido drásticamente aumentados a las mas altas densidades (3, 12, 13). El
objetivo de la explotación de bananos es obtener la máxima producción/ha/año, por
cualquiera de estas dos vías: aumentando el peso y el número de los racimos o acortando
los intervalos entre los ciclos de cosecha (11). En plantaciones con altas densidades se
ha detectado una gran variabilidad entre planta y planta. Plantas que faltan en la
producción de racimos por un tiempo bastante considerable, producen mayor variabilidad,
lo que significa una mayor dispersión del tiempo de cosecha, que dificulta manipular los
lapsos de producción, aún contando con una adecuada selección de los hijos (4).
En la era del clon de banano "Gros Michel", en la década de
los 30 en América Central, las distancias recomendadas en suelos aluviales francos,
fértiles, fueron 4,87 m x 4,87 m con cuatro hijos dejados por planta. Luego, en las
primeras etapas de la conversión de los clones "Gros Michel" a
"Cavendish", en la década de los 60s las poblaciones no excedían de 1374
plantas/ha. En los 70s las poblaciones fueron más altas. De hecho, las plantaciones son
ahora de alrededor de 1720 plantas/ha. Sobre suelos muy fértiles 1500 a 1600 plantas/ha
de las variedades mas altas de Cavendish (Giant Cavendish), proveen un dosel completo (IAF
de 4,0 a 4,5). Debido al menor follaje por planta y menor espacio ocupado por su follaje,
el clon "Grand Nain" puede ser plantado a poblaciones 10 a 15% mayores que los
clones altos de Cavendish (14).
En un estudio realizado a 1310 msnm en Colombia, con el clon
Dominico-Hartón (Musa AAB, Simmonds), Belalcázar et al. (2) concluyeron
que, la densidad de población está condicionada por las distancias de plantación y por
el número de plantas por cada sitio de producción e influye en los componentes del
desarrollo y la producción. La variable más afectada fue la duración del ciclo
vegetativo, la cual se incrementó hasta 21%, cuando se cultivaron más de dos plantas por
sitio de producción. Los pesos de los racimos aumentaron a través de los ciclos, cuando
se dejó una planta por sitio de plantación. En tanto que, con más de una planta se
redujeron de un ciclo a otro. En términos generales, la vida útil de la plantación se
redujo marcadamente con el aumento de la densidad de población.
Nava (7) trabajando con cambur manzano (Musa AAB) apuntó que,
los menores ciclos de cosecha 377 a 387 días se correspondieron con las mayores
distancias (3,0 m x 2,0 m; 3,0 m x 2,5 m; y 3,0 x 3,0 m). El peso de racimo osciló entre
13,9 kg (2,5 m x 2,0 m) y 15,7 kg (2,5 m x 3,0 m) sin mostrar diferencias significativas
entre los tratamientos. La máxima producción estimada: 27.786 kg/ha fue obtenida con la
población máxima usada (2000 plantas/ha). En plátano, estudios realizados al Sur del
Lago de Maracaibo, reportaron que, al incrementarse el número de cepas por hectárea de
714 a 1428, [disminuyó de 92,6 a 79,6] el porcentaje de plantas florecidas 360 días
después de la plantación (8).
En plantaciones establecidas 3,0m x 3,0m y 4,0m x 4,0m, en el primer
período, se obtuvieron tantos racimos como cepas existían. Para el segundo período
(primer año de cosecha), se logró una producción máxima de 3 racimos/cepa, la
producción bajó con el transcurrir del tiempo; sin embargo, en cinco años, se mantuvo
sobre los dos racimos/ha/año (10)
Nava y Sosa (9) señalaron que, en 15 meses de cosechas, las mayores
producciones (35,4 toneladas y 3557 racimos por hectárea) se obtuvieron con 2500
plantas/ha, declinando la producción con poblaciones superiores a 3000 plantas/ha. Las
cosechas fueron uniformes a las mas bajas densidades; mientras que, con las altas se
concentraron en los primeros seis meses, disminuyendo al final del período.
Govea (5) consiguió que, la producción en la primera cosecha (plantas
madres), no fue afectada por el número de hijos dejados en cada cepa. En las
subsiguientes cosechas, el aumento de número de hijos, debido a la competencia,
disminuyó la calidad del racimo y la vida útil de la plantación. La mejor alternativa
fue deshijar mediante el sistema lineal, dejando la sucesión madre-hijo-nieto,
seleccionando cada cuatro meses el hijo sucesor. Por este método, se obtuvieron 1,77
racimos de buena calidad por cepa/año y producciones que superaron los 20.000 kg/ha/año.
Añez et al. (1) postularon que, las poblaciones de plantas de
plátano podrían ser aumentadas hasta el punto, donde la producción de la última planta
adicionada o dejada en un área determinada, sea mayor o igual a la suma de las
reducciones que su competencia provoque en el resto de las plantas que comparten dicha
superficie.
El presente estudio pretende estudiar el número de plantas por
hectárea más adecuado para la explotación comercial del plátano en la zona Sur del
Lago de Maracaibo y cuantificar bajo esas condiciones, los efectos del número de plantas
por hectárea y por cepa, sobre el tamaño y peso de los racimos y sobre la duración del
ciclo productivo de las plantas.
Materiales y métodos
El trabajo de campo se realizó entre junio 1993 y marzo 1996, en la
finca " La Chiquinquirá", ubicada al nivel del kilómetro 15 de la carretera
Santa Bárbara del Zulia - El Vigía, estado Mérida, población del Sur del Lago de
Maracaibo, perteneciente al municipio Colón, estado Zulia, Venezuela (08º 56' N, 71º
52' W), altitud alrededor de 20 msnm. La precipitación, la temperatura del aire y la
humedad relativa anual promedios, durante ese lapso fueron: 1609 mm, 26,8°C y 82%,
respectivamente.
El suelo, según Kijewski et al. (6) pertenece a la Unidad Chama
No. 1 y estudios más recientes lo han clasificado como Fluventic Eutropepts, y fue
muestrado (0-0,2m) para análisis de laboratorio (cuadro 1).
El material de plantación usado pertenece al género Musa,
grupo AAB, Subgrupo Plátano cv. Hartón.
Para el montaje del ensayo se utilizó como diseño experimental un
arreglo de tratamientos factorial completo 3x2x3, con tres factores de estudio (distancias
entre hileras-H-, distancias entre plantas dentro de las hileras -P- y número de hijos
por planta -N-) a tres (2, 3 y 4m), a dos (2 y 3 m) y a tres ( 1, 2 y 3 hijos/planta)
niveles, respectivamente, en bloques al azar con tres repeticiones y los 18 tratamientos
que conforman las combinaciones que se muestran en el cuadro 1.
Cada unidad experimental constó de 12 plantas, cuatro hileras de tres
plantas cada una. La plantación se estableció en un predio con predominio de guinea
( Panicum maximum Jacq.), hondura (Ixophorus unicetus (Presl.)
Schult.), cortadera (Cyperus ferax (L) Rich), pira (Amaranthus dubius Mart.) y suelda con suelda (Zebrina pendula Schnizl.).
La preparación del suelo se hizo con tractor mediante tres pases de
rastra. Se usaron hijos "puyones" sin chimenea con peso aproximado de un
kilogramo cada uno, los cuales se plantaron el 15-06-93 en hoyos de 0,3m x 0,3m x 0,3m, en
cuyos fondos, se hizo previamente la aplicación de 20 g del insecticida - nematicida
Furadán (Carbofurán) y 1000 g de la fórmula completa 14-14-14 como fertilizante.
Se hizo control químico alternado con macheteo de las malezas, cada
vez que hubo necesidad de ello. Los herbicidas utilizados fueron: Round - up (Glifosato),
Gramoxone (Paraquat), Reglone (Diquat) y Hierbatox (Diurón) al 1%, 0,5%, 0,5% y 2 kg/ha,
respectivamente, de los productos comerciales, de acuerdo con el tipo de malas hierbas
prevalecientes.
Para los dehijes se usó el sistema lineal, dejando la sucesión madre
- hijo - nieto, seleccionado cada cuatro meses el hijo sucesor. De modo que, casi siempre
se contó con tres, cinco y siete individuos de diferentes tamaños por sitio de
plantación, de acuerdo con el diseño del ensayo. El resto de los hijos fué eliminado
sistemáticamente en lapsos no mayores a dos meses.
Prácticas agronómicas como: fertilización, pastoreo, deshoje,
descepe, control de malezas y control de plagas y enfermedades se realizaron en toda la
plantación, siguiendo las recomendaciones dadas para la explotación comercial de
plátano en la zona del estudio.
Las cosechas se comenzaron el 14-03-94, sobre las dos plantas centrales
de cada tratamiento, se continuaron cada 14 días hasta el 30-10-95. Se registró peso del
racimo, número de manos, número de dedos por mano y peso de los dedos. El peso promedio
de los racimos, rendimiento en t/ha y los intervalos de cosecha, se analizaron
estadísticamente.
Cuadro 1. Combinaciones de tratamientos.
1. H1 P1 N1 |
7. H2 P1 N1 |
13. H3 P1 N1 |
2. H1 P1 N2 |
8. H2 P1 N2 |
14. H3 P1 N2 |
3. H1 P1 N3 |
9. H2 P1 N3 |
15. H3 P1 N3 |
4. H1 P2 N1 |
10. H2 P2 N1 |
16. H3 P2 N1 |
5. H1 P2 N2 |
11. H2 P2 N2 |
17. H3 P2 N2 |
6. H1 P2 N3 |
12. H2 P2 N3 |
18. H3 P2 N3 |
Cuadro 2. Análisis de suelo de la zona en donde se realizo el
estudio.
Variables |
Clase |
pH |
C.O |
N.Tot |
C/N |
P.Olsen |
K.Aprov |
Mg. Aprov |
|
Text. |
(1:2) |
(%) |
(%) |
- |
(pmm) |
(meq/100g) |
(meq/100g) |
l993 |
FL |
7,10 |
1,29 |
0,15 |
8,60 |
30 |
0,245 |
1,50 |
Resultados y discusión
Las cosechas de las plantas madres de plátano se iniciaron 272 días
después de plantadas. El peso promedio de los racimos no fue influido significativamente
por los tratamientos, en tanto que, los rendimientos fueron significativamente afectados
por los tratamientos.
La significancia de la interacción HxP, implica que, las diferencias
entre las respuestas de los rendimientos en t ha-1 de las plantas madres de
plátano, solo se observaron cuando las respuestas fueron medidas considerando el número
de hijos por planta (N), en promedio.
En términos reales, se comprobó que, bajo las condiciones del
estudio, siempre rindieron mas las parcelas plantadas con la distancia de 2m entre plantas
(P1).
La ecuación de regresión permitió determinar la variación provocada
en los rendimientos de las plantaciones realizadas a 2 m entre plantas (P1) por cada
unidad de cambio ocurrida en las distancias entre hileras -H- (figura 1).
De las cosechas de las plantas de la segunda generación (hijos), tanto
el peso promedio de los racimos como los rendimientos por hectárea fueron influidos
significativamente por los tratamientos. Del análisis se desprende que el peso de los
racimos de las plantas hijas fue afectado significativa e independientemente por las
distancias entre plantas (P) y por el número de hijos por planta (N). La mejor distancia
fue la de 3m entre plantas (P2), con un peso medio de 12,97 kg/racimo, superior a 12,53
kg/racimo, registrado para 2 m entre plantas (P1). En cuanto al número de hijos por
planta, se aprecia respuesta sólo para el componente lineal, (figura 2).
En cuanto a los rendimientos, al resultar significativa la interacción
triple HxPxN, se procedió a evaluarla. Se midió a que niveles de N, se presentó la
dificultad de la interacción HxN. De dicho exámen, se desprende que la dificultad se
presenta a todos los niveles de N. Por tal razón, se procedió directamente a evaluar los
efectos simples de los niveles de H para los dos niveles de P a los tres niveles de N,
resultando significativas las interacciones siguientes: HP1N1 (li-neal), HP1N2 (lineal y
cuadrática), HP1N3 (lineal y cuadrática), HP2N1 (lineal), HP2N2 (lineal) y HP2N3
(lineal). No obstante, como los rendimientos de las plantas hijas de plátano, para ambas
distancias entre plantas (P1 y P2), se incrementaron con el aumento del número de hijos
por planta (N), se calcularon sólo las ecuaciones de las interacciones HP1N3
(cuadrática) y HP2N3 (lineal) y se fijaron sus curvas. (figura 3).
La diferencia en las dos curvas de la figura 3 muestra la naturaleza de
la interacción HxPxN. Las ecuaciones pueden ser usadas para estimar los rendimientos (t
ha-1) de plátano producido por los tratamientos P1 N3 y P2 N3, a las distintas
distancias entre hileras empleadas.
El análisis de los datos de las cosechas de las plantas de plátano de
la tercera generación (nietos), detectó diferencias significativas tanto en los pesos
promedios de los racimos como en los rendimientos. El peso de los racimos de la segunda
generación (hijos) fue afectado significativamente sólo por el componente lineal del
número de hijos por planta -N-, (figura 4).
Figura 1. Respuesta de rendimiento de las plataciones a 2,0 m entre
plantas madres de plátano a diferentes distancias entre hileras.
La evaluación de la interacción HP, indicó que, las diferencias
entre las respuestas de los rendimientos de las plantas de plátano de la segunda
generación obtenidas con cada una de las distancias entre plantas (P1 y P2) usadas bajo
las condiciones ecológicas y de manejo concurrentes durante esta parte del estudio,
variaron linealmente con las distancias entre hileras (H), cuando dichas respuestas fueron
medidas, considerando el número de hijos por planta (N) como un promedio. Se consiguió
que los rendimientos (t ha-1) siempre fueron superiores cuando se utilizó la
menor distancia entre plantas 2 m -P1- (figura 5).
Figura 2. Peso promedio de los racimos de la primera generación de
plantas de plátano con diferente número de hijos por planta.
Figura 3. Respuesta de rendimientos de la segunda generación de
plantas de plátano bajo diferentes distancias de plantación y 3 hijos por planta.
La significancia de la interacción HN, indica que, las diferencias
entre las respuestas de los rendimientos de las plantas de plátano de la tercera
generación y el número de hijos por planta (N) variaron con cada distancia entre hileras
(H), cuando las respuestas fueron registradas como promedio de las distancias entre
plantas (P) probadas. Esto aunado a que los mayores rendimientos se alcanzaron con el
número máximo de hijos por planta (N3), indujo a calcular la ecuación HN3. (figura 6).
Figura 4. Peso promedio de los racimos de la segunda generación de
plantas de plátano con diferente número de hijos por planta.
Figura 5. Rendimiento de la segunda generación de plantas bajo
diferentes distancias de plantación.
Con la interacción PN, además se comprobó en su evaluación, que los
mas altos rendimientos se lograron con la menor distancia entre plantas (P1); por ello se
procedió a calcular la ecuación P1N. (figura 7).
El análisis de variancia de los pesos promedios (kg) de los racimos y
los rendimientos (t ha-1) de las plantas de plátano de la cuarta generación
(bisnietos), señala que, ambas variables fueron significativamente afectadas por los
tratamientos.
Figura 6. Rendimiento de la segunda generación de plantas de
plátano bajo diferentas distancias de plantación y tres hijos por sitio de producción.
Figura 7. Rendimiento de la segunda generación de plátano bajo
diferentes números de plantas por sitio de producción y a 2 m de distancia entre
plantas.
La significancia de la interacción HP, implica que, las diferencias
entre las respuestas del peso de los racimos a las distancias entre plantas (P) varió con
cada distancia entre hileras (H), cuando esas respuestas fueron medidas, considerando el
número de hijos por sitio de plantación (N) como un promedio.
De la evaluación de la interacción HP, se desprende que, en ambas
distancias entre plantas, los pesos de los racimos tendieron a incrementarse a las mayores
distancias entre hileras. Sin embargo, sólo se detectaron diferencias significativas para
la mayor distancia entre plantas (P2). En consecuencia, se calculó la ecuación -HP2, y
se fijó su curva. (figura 8).
La interacción HN fué significativa, lo cual denota que, las
diferencias en las respuestas del peso de los racimos a los distintos números de hijos
por sitio de producción (N) varió con cada distancia entre hileras (H), cuando las
respuestas fueron registradas considerando las distancias entre plantas (P) como promedio.
En la evaluación lineal y cuadrática de la interacción HN, sólo en las interacciones
HN1 (cuadrática) y HN2 (lineal) se detectó diferencias significativas. Además, como los
pesos de los racimos fueron superiores con el menor número de hijos por sitio de
producción (N1), se calculó la ecuación HN1 y se fijó su curva (figura 9).
En los rendimientos al resultar significativa la interacción triple
HPN, se procedió a evaluarla. Se examinaron las interacciones dobles, mediante sus
combinaciones lineales y cuadráticas.
En la evaluación se notó dificultad para detectar significancia a
nivel de la interacción HN, se presentó a todos los niveles de N. Por consiguiente, se
procedió directamente a medir los efectos individuales de los niveles de H para los dos
niveles de P a los tres niveles de N. Resultando significativas las interacciones
siguientes: HP1N1 (lineal), HP1N2 (lineal), HP1N3 (lineal y cuadrática), HP2N1 (lineal),
HP2N2 (lineal) y HP2N3 (lineal y cuadrática). No obstante, como los rendimientos de las
plantas de plátano de la tercera generación, para ambas distancias entre plantas P1 y
P2, se incrementaron con el aumento del número de hijos por sitio de producción, se
calcularon sólo las ecuaciones cuadráticas, correspondientes a las interacciones HP1N3 y
HP2N3 y se fijaron sus curvas (figura 10).
Figura 8. Peso promedio de los racimos de plantas de plátano de la
cuarta generación bajo diferentes distancias de plantación.
Figura 9. Peso promedio de los racimos de plátano de la cuarta
generación bajo diferentes distancias de plantación y un hijo por sitio de producción.
El análisis estadístico de los intervalos de cosechas que, durante
más de un año fueron medidos a las tres generaciones siguientes a las plantas madres de
plátano, mostró diferencias significativas entre los tratamientos. Al resultar
significativa la interacción triple HPN, se procedió a evaluarla; para ello, se
examinaron las interacciones dobles HP, HN y PN mediante sus combinaciones lineales y
cuadráticas. El exámen, indicó que sólo la interacción PN presentó dificultades, la
cual, se evidenció en la comparación lineal del nivel uno de la distancia entre plantas
(P1). Al resultar no significativos los efectos individuales de los tres niveles de N al
nivel uno de P1 a los tres niveles de H.
Se calculó la ecuación de regresión lineal de la interacción HP1N y
se fijó su curva. (figura 11).
El análisis de variancia de los datos de producción en t ha-1 año-1, registrados desde la plantación hasta la cuarta generación de las
plantas de plátano, mostró diferencias significativas entre los tratamientos.
La significancia de las interacciones dobles HP, HN y PN, expresa que,
las respuestas de la producción en t ha-1 año-1 de las plantas de
plátano a cualquiera de los tratamientos H, P o N, fueron modificadas por todos o por
alguno de los niveles de los otros tratamientos P, N o H utilizados.
La evaluación de la interacción HP señala que, las diferencias entre
las respuestas de la producción en t ha-1 año-1, obtenidas con
cada una de las distancias entre plantas (P1 y P2) usadas, bajo las condiciones
ecológicas y de manejo concurrentes durante todo el estudio, variaron con las distancias
entre hileras (H) probadas, cuando dichas respuestas, fueron medidas, considerando el
número de hijos por sitio de producción (N) como un promedio. Además, como los
rendimientos en cada nivel de H (H1, H2 y H3), fueron siempre superiores con el empleo de
la menor distancia entre plantas (P1), se calculó la ecuación de la interacción HP1 y
se fijó su curva. (figura 12).
Figura 10. Rendimiento de la segunda generación de plantas de
plátano bajo diferentes distancias de plantación y distinto número de hijos por sitio
de producción.
Figura 11. Intervalos de cosechas de las plantas madres de plátano
sometidas a diferentes distancias de plantación y distintos números de hijos por sitio
de producción.
El estudio de la interacción HN, indicó que, las diferencias entre
las respuestas de la producción en t/ha/año de las tres generaciones de plátano,
obtenidas con cada uno de los niveles del número de hijos por sitio de producción usados
(N1, N2 y N3), variaron con cada distancia entre hileras (H), cuando las respuestas fueron
registradas, considerando las distancias usadas entre plantas (P1 y P2) como un promedio.
Además, como las producciones en t/ha/año en cada nivel de H, fueron siempre superiores
con el mayor número de plantas por sitio de producción (N3), se calculó la ecuación de
la interacción HN3 y se fijó su curva. (figura. 13).
Se usó el mismo procedimiento para la evaluación de la interacción
PN. Se comprobó además que, para cada nivel del número de hijos por sitio de
producción (N1, N2 y N3), las mayores producciones se obtuvieron con la menor distancia
entre plantas usadas (P1), se calculó la ecuación de la interacción P1N y se fijó su
curva (figura 14).
La variación del peso promedio de los racimos de las plantas de
plátano en las cuatro generaciones cosechadas en cada uno de los números de hijos por
sitio de plantación se presenta en el cuadro 2.
Figura 12. Producción en t/ha/año de los racimos de los promedios
generacionales de las tres primeras generaciones de plátano sometidas a diferentes
distancias de plantación.
Figura 13. Producción en t/ha/año de los racimos de la población
inicial y tres generaciones de plátano sometidas a diferentes distancias de plantación y
distinto número de hijos por sitio de producción.
Los pesos promedios de los racimos de plátano, dentro de los límites
y condiciones del estudio, respondieron de la manera siguiente: en las plantas madres, no
mostraron diferencias significativas entre los tratamientos aplicados. En la primera
generación y segunda generación, hubo respuesta significativa de los pesos promedios
ante el número de hijos por sitio de producción. Los pesos promedios aumentaron
linealmente con la disminución del número de hijos (figuras 2 y 4), ya que en las
plantas de la tercera generación, los pesos promedios de los racimos fueron influidos por
las interacciones dobles HN y HP. Esto significa que, el efecto del número de hijos se
vió modificado por todos y cada uno de los niveles de las distancias entre hileras
empleadas. Se mantuvo sin embargo, la superioridad de los pesos promedios de los racimos
en las parcelas con un hijo por sitio de producción -N1- (figura 9). Debe destarcarse
también que la significancia de la interacción HP, señala que, todos o algunos de los
niveles de las distancias entre hileras (H) combinados con todos o algunos de los niveles
de las distancias entre plantas (P) empiezan a influir los pesos de los racimos. Los
mayores pesos de los racimos se lograron con la combinación de las mayores distancias
entre hileras y entre plantas, respectivamente (H3P2), evidencia indubitable de que en las
plantas con las menores distancias de plantación usadas, comienzan a notarse los efectos
de una marcada competencia. (figura 8).
En términos generales, el peso promedio (kg) de los racimos de las
plantas de plátano bajo las condiciones ecológicas y de manejo del estudio, respondió
al número de hijos por sitio de producción. Las plantaciones con un hijo, mantuvieron e
incluso, mostraron pequeños aumentos en sus pesos promedios hasta la segunda generación
de plantas, ya para la tercera generación hubo una caída apreciable en el peso de los
racimos. Con dos hijos, las disminución se empieza a notar, aunque sin efectos
significativos, a partir de la segunda generación de plantas. Esta situación se acentuó
en las parcelas con tres hijos por sitio de plantación, en las cuales, hubo una caída
lineal de los pesos promedios de los racimos a partir de las plantas hijas (cuadro 2)
Los resultados asoman la posibilidad de emprender explotaciones hasta
de tres generaciones de plátano, con sistemas de plantación 2 m x 2 m con dos hijos por
sitio de producción, sin cambios acentuados en los pesos promedios de los racimos
obtenidos y sin desmedro de su calidad. Los rendimientos de plátano (t ha-1)
de las plantas madres, aumentaron con la disminución de las distancias de plantación
tanto entre hileras (H) como entre plantas (P) y no fueron afectados significativamente
por el número de hijos por sitio de plantación (figura. 1), concordando con Nava et
al (10) y Govea (5). A partir de la segunda generación de plantas, el número de
hijos por sitio de producción empieza a modificar o influir las variaciones que en los
rendimientos en forma separada o en conjunto, provocaron las distancias de plantación H y
P. Esto quedó en evidencia, por la significancia de las interacciones HPN, HN, PN y HPN
señaladas en el análisis de la primera, segunda y tercera, generacion respectivamente.
Figura 14. Producción en t/ha/año de los racimos de la población
inicial y tres generaciones de plátano sometidas a diferentes distancias de plantación y
número de hijos por sitio de producción.
La producción en t ha-1 año-1, de las cuatro
generaciones evaluadas en el estudio, fue también influida significativamente por las
interacciones HN y PN. En síntesis, los rendimientos de plátano en la población inicial
y las tres generaciones del estudio, aumentaron con la disminución de las distancias de
plantación empleadas, concordando con Simmonds (13), Champion (3), Robinson y Nel (12) y
Daniells et al. (4) en banano, con Nava (7) en cambur manzano y con Añez et al. (1), Nava y Sosa (8) y Nava et al (10) en plátano.
Tabla 2. Peso promedio (kg) de los racimos de la población inicial
y tres generaciones de plátano de generaciones cosechadas al variar el número de hijos
por sitio de producción.
|
|
Número de hijos por sitio de producción |
Generación |
Plantas |
1 |
2 |
3 |
Media |
Población |
Inicial |
12,61 |
12,57 |
12,62 |
12,60 |
1 |
Primera generación |
13,29 |
12,75 |
12,21 |
12,75 |
2 |
Segunda generación |
12,93 |
12,00 |
10,95 |
11,96 |
3 |
Tercera generación |
10,61 |
10,19 |
9,67 |
10,16 |
|
Media |
12,36 |
11,88 |
11,36 |
11,87 |
A partir de la primera generación los rendimientos (t ha-1)
y la producción (t ha-1 año-1) fueron afectados también por el
número de hijos por sitio de producción. Los máximos rendimientos y producción fueron
siempre obtenidos con las menores distancias de plantación y con el mayor número de
hijos por sitio de producción (figuras 3, 6, 10, 13 y 14).
En el estudio, se determinó que los intervalos de cosecha (IC) de las
tres generaciones siguientes a las plantas madres de plátano, fueron afectadas
significativamente por la interacción triple HPN.
De la evaluación de dicha interacción se desprende que, las
variaciones más acentuadas se produjeron a todos los niveles de número de hijos por
sitio de producción (N), al nivel uno de las distancias entre plantas (P1), considerando
las distancias entre hileras (H) como un promedio. En la figura. 11, se observa que, al
nivel uno de las distancias entre plantas (P1), los IC aumentaron casi 9 días por el
incremento de un hijo por sitio de producción. Estos resultados concuerdan con Champion
(3) en cuanto a que los ciclos del banano se hacen más largos en poblaciones densas, con
Robinson y Nel (12), quienes señalaron reducciones drásticas en los IC a las menores
densidades de plantación en banano, con Belalcázar et al (2) en cuyas
conclusiones acotaron que, en el clon Dominíco-Hartón la variable más afectada fué la
duración del ciclo vegetativo, el cual, fue incrementando hasta 21%, cuando se cultivaron
más de dos plantas por sitio de producción y con Añez et al (1) quienes
consiguieron que en plátano, los IC disminuyeron cerca de 8 días por cada metro de
aumento de la distancia de plantación entre hileras.
Conclusiones
De los resultados obtenidos dentro de los límites y conclusiones del
estudio, se puede señalar lo siguiente:
Los pesos de los racimos de las plantas madres de plátano no mostraron
diferencias significativas entre los tratamientos aplicados. En la primera y segunda
generación los pesos promedios aumentaron linealmente con la disminución del número de
hijos. Para la tercera generación se mantuvo la superioridad de los pesos promedios en
las parcelas con un hijo por sitio de producción y también, sobresalieron aquéllos,
donde se combinaron las mayores distancias entre hileras y en tre plantas.
Los rendimientos en la población inicial y las generaciones del
estudio, aumentaron con la disminución de la distancia de plantación empleadas. A partir
de la primera generación, los máximos rendimientos y producción fueron siempre
obtenidos con las menores distancias de plantación combinadas con el mayor número de
hijos por sitio de producción.
Los intervalos de cosecha (IC) de las tres generaciones siguientes a
las plantas madres, fueron afectados significativamente por la interacción de los tres
tratamientos aplicados. Se observó que a la menor distancia entre plantas los IC
aumentaron casi 9 días con el incremento de un hijo por sitio de producción.
Literatura citada
1. Añez, B., E. Tavira y J.A.Salas. 1991. Efecto de la distancia entre
hileras sobre la producción de plátano. In: Añez, B., Nava, C., Sosa, L. y Jaramillo,
R. (Eds) : Memorias, IX Reunión, ACORBAT., Mérida, Venezuela, 24-29, Septiembre
1989. ACORBAT, Maracaibo, Venezuela, 457-471.
2. Belalcázar, C., S.; J.A. Valencia M. y M.I. Arcila P. 1994. Estudio
sobre densidades de población en plátano clon Dominico-Hartón (Musa AAB,
Simmonds) en Colombia. In: Contreras, M., Guzmán, J. A. y Carrasco L. (Eds.): Memorias, X
Reunión, ACORBAT., Villahermosa, Tabasco, México, 3-8 Noviembre 1991. ACORBAT, San
José, Costa Rica, 535-548.
3. Champion, J. 1968. El plátano, Edición española - Editorial
Blume. Madrid.
4. Daniells, J.W., P.I. O'farrell, J.C. Mulder and S. J. Campbell.
1987. Effect of plant spacing on yield and plant cha-racteristics of banana in North
Queensland, Aust. J. Exp. Agric., 27:727-731.
5. Govea, C.; D.E. 1991. Influencia del número de hijos y frecuencia
de deshije en el rendimiento del plátano Hartón (Musa AAB subgrupo plátano cv.
Hartón). In: Añez, B., Nava, C., Sosa, L. y Jaramillo, R. (Eds.): Memorias, IX Reunión,
ACORBAT., Mérida, Venezuela, 24-29. Septiembre 1989. ACORBAT., Maracaibo, Venezuela,
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6. Kijewski, J., J.M. Colina, P. Steegmayer, A. Madero y Z. Bojanowski.
1981. Estudio de suelos detallado. Sector río Mucujepe - río Escalante, zona sur del
Lago de Maracaibo. Maracaibo, Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales
Renovables, Serie, Informes Técnicos. 283 p.
7. Nava, C. 1994. Efecto de la distancia de siembra sobre el
rendimiento de cambur manzano (Musa AAB). In: Contreras. M., Guzmán, J. A. y
Carrasco, L. (Eds.): Memorias, X Reunión, ACORBAT., Villahermosa, Tabasco, México, 3-8
Noviembre 1991. ACORBAT., San José, Costa Rica, 587-596.
8. Nava, C. y L. Sosa. (1981-1983). Manejo de plantaciones de plátano
en la cuenca del Lago de Maracaibo. Revista de la Facultad de Agronomía (LUZ) 6: 725-732.
9. Nava, C. y L. Sosa. 1984. Efecto de la densidad de siembra en la
plantación de plátanos. Resúmenes de Trabajos. XI Jornadas Agronómicas. Trabajo No. M-
12. SVIA., Maracaibo, Venezuela.
10. Nava, C., L. Sosa, N. González y M. Cabrera. 1980. Dinámica de la
producción de la cepa de plátano. In: Memorias, II Encuentro Nacional de Investigadores
de plátanos y cambures. SVIA (Zulia) - FONAIAP. (Est. Chama) - LUZ (Agronomía). El
Vigía, Mérida, Venezuela.
11. Robinson, J.C. and A.J. Alberts. 1986. Growth and yield responses
of banana ( cultivar "Williams") to drip irrigation under drought and normal
rainfall conditions in the sub-tropics. Scientia Horticulturae 30: 187-202.
12. Robinson, J.C., and D.J. Nel. 1986. The influence of planting date,
sucker selection and density on yield and croptiming of banana (cultivar
"Williams") in the Eastern Transval. Scientia Horticulturae 29: 347-358.
13. Simmonds, N.W. 1966. Bananas. 2nd edition. Longmans, Green and Co.
L.T.D. London.
14. Stover, R.H. and Simmonds, N.W. 1987. Bananas, John Wiley and Sons,
New York.
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